Tercer aniversario de la Estrategia de Seguridad Nacional

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Tercer aniversario de la Estrategia de Seguridad Nacional
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EN CLAVE DE TRES

La Estrategia de Seguridad Nacional fue aprobada el 31 de mayo de 2013. Hoy cumple tres años, un periodo en el que se han alcanzado grandes logros que queremos compartir contigo en clave de tres.

Tres factores convergentes

La adopción de la Estrategia de Seguridad Nacional se explica con la convergencia de tres factores: el momentum político, la creación del Departamento de Seguridad Nacional del Gabinete de la Presidencia del Gobierno y una visión de un proyecto compartido.

En primer lugar, la ubicación temporal del inicio del proyecto nos sitúa en el año 2012, año en el que comienzan a desarrollarse diversas iniciativas por parte del Gobierno en el marco del arranque la X Legislatura, y entre las que destaca una por su importancia: el proyecto de Seguridad Nacional.

En segundo lugar, una decisión clave fue la creación del Departamento de Seguridad Nacional en el Gabinete de la Presidencia del Gobierno. El nombre elegido – Departamento de Seguridad Nacional (DSN) – y la adscripción orgánica a la Presidencia del Gobierno a través de su gabinete es toda una declaración de intenciones: un nuevo departamento ubicado en el más alto nivel orgánico posible dentro de la Administración dedicado a generar y hacer crecer un proyecto innovador y creativo al servicio de la ciudadanía española.

El tercer paso relevante fue el entendimiento de que el proyecto de Seguridad Nacional no era una labor que pudiera ser acometida por unos pocos. La Seguridad Nacional es tarea de todos y para todos.

Un proceso de elaboración 3D

Hacía falta un plan. Hacía falta volcar unas ideas modernas e innovadoras en un documento que sirviera como punto inicial de partida. Un documento que relatara nuestra concepción de la Seguridad Nacional desde el plano político-estratégico.

El proceso de elaboración de la Estrategia es un proceso 3D, por cuanto es un ejercicio que cuenta con tres dimensiones: el consenso político, la apertura a un número de actores con voz relevante, y la innovación estratégica, toda vez que  se sientan las nuevas bases de una cultura estratégica en nuestro país.

La primera dimensión que bien merece la pena poner en valor es el consenso político. La Estrategia de Seguridad Nacional es fruto del acuerdo político alcanzado por las dos principales formaciones políticas en España para poner en marcha un proyecto al que se le puede calificar como auténtica política de Estado.

La segunda dimensión, la apertura intelectual, ha jugado un papel muy importante en el proceso de elaboración. No se comenzaba desde un papel en blanco, por cuanto el punto de partida fue un riguroso trabajo de revisión de la Estrategia de Seguridad Española de 2011.  En el proceso de redacción han estado implicados profesionales y expertos de reconocido prestigio. De esta forma, el contenido de la estrategia cuenta con enfoques elaborados desde perspectivas distintas que se complementan entre sí y aportan gran riqueza intelectual, haciendo de todo el documento un contenido armónico y equilibrado.

La tercera dimensión, y gran cualidad del proceso de elaboración de la Estrategia de Seguridad Nacional, es su anticipación estratégica. Desde el comienzo hasta el fin, el proceso de elaboración de la estrategia resultó ciertamente un ejercicio de innovación, por cuanto hacer una diagnosis del estado de la Seguridad Nacional de España, detectar los principales desafíos, y levantar unas líneas de acción estratégicas para el acometimiento de los objetivos fijados resulta una labor ciertamente innovadora y orientada a la acción.

Los tres componentes fundamentales de la Seguridad Nacional

La Defensa Nacional, la Seguridad Pública y la Acción Exterior son los tres componentes fundamentales sobre los que se articula la Seguridad Nacional, definida de forma explícita en nuestra estrategia como la acción del Estado dirigida a proteger la libertad y el bienestar de sus ciudadanos, a garantizar la defensa de España y sus principios y valores constitucionales, así como a contribuir junto a nuestros socios y aliados a la seguridad internacional en el cumplimiento de los compromisos asumidos.

Tres significados para una estrategia

Una estrategia ordena ideas en torno a fines, líneas de acción y recursos.

Una Estrategia ha de establecer unos fines, una visión sobre la que articular los intereses y activos a proteger. En el caso de la Estrategia, los dos primeros capítulos constituyen el marco sobre el que se determina una visión integral y amplia de la Seguridad Nacional, así como el entorno de seguridad en un mundo globalizado desde la lente de nuestro país.

La segunda dimensión de una estrategia es la aplicación de puro sentido común para levantar un diagnóstico de los retos y desafíos.  La Estrategia, en su tercer y cuarto capítulos, enumera una serie de riesgos y amenazas a la seguridad nacional que se transforman en líneas de acción estratégicas y objetivos perfectamente delimitados

El tercer significado que tiene la Estrategia de Seguridad Nacional 2013 es el de la puesta en marcha de un Sistema que sirva como punto de referencia  para desarrollar toda una batería de iniciativas novedosas basadas en la firme creencia de que la seguridad de España y de sus ciudadanos es la mayor de las responsabilidades que el Gobierno tiene asignadas. De esta forma, la Estrategia contempla al Consejo de Seguridad Nacional, presidido por el Presidente del Gobierno, como la piedra angular sobre la que edificar un Sistema que materialice las ideas en medidas concretas.

Los tres actores

Aquí vuelve a aparecer el número tres: la participación colectiva de toda la Administración, de la sociedad civil y del sector privado resultaba uno de los parámetros sobre los que se construiría, con un significado muy especial, nuestro slogan, Seguridad Nacional, un proyecto compartido, toda una declaración de intenciones que guiaría las actuaciones llevadas a cabo hasta la fecha. 

Del camino andado …….tres estrategias sectoriales

Mucho ha sido el trabajo realizado en estos tres años de Estrategia. El desarrollo progresivo de las líneas estratégicas nos ha llevado a aprobar tres estrategias para los ámbitos de la seguridad marítima, la ciberseguridad y la seguridad energética.

La promulgación de la Estrategia de Ciberseguridad Nacional obedece a la creciente preocupación de uno de los sectores más novedosos, y a la vez más desafiantes para nuestra sociedad. La ausencia de fronteras en el ciberespacio, así como la facilidad de realizar actos ilícitos a través de la red, genera un dominio en el que los beneficios que pueden obtener las redes criminales, de cualquier naturaleza, superan con creces los riesgos y costes.

En cuanto a Seguridad marítima, España ha sido pionera al ser el primer estado de la Unión Europea en publicar una Estrategia de Seguridad Marítima Nacional. Países como Reino Unido, o la propia Unión Europea han seguido nuestro ejemplo poco después. La condición marítima de España bien merecía la pena reflejarla de alguna manera, y qué mejor forma que hacer un documento que hable a las claras de las oportunidades que el mar brinda para nuestro país.

Por su parte, la Estrategia de Seguridad Energética Nacional supone un hito reseñable, por cuanto es el primer documento que da tratamiento de forma integral a la seguridad energética como valor indispensable para el normal desarrollo y funcionamiento de nuestra economía y nuestra sociedad.

 
Figura 1: Estrategias de ciberseguridad, seguridad marítima y seguridad energética 
 

…y tres Informes Anuales de Seguridad Nacional

El Informe Anual de Seguridad Nacional obedece a un triple propósito, informar al ciudadano, dar cuenta de los retos y realizaciones en materia de Seguridad Nacional y evaluar el grado de cumplimiento de la Estrategia.

De esta forma, desde su primera edición correspondiente al informe del año 2013, son ya tres los Informes Anuales de Seguridad Nacional publicados.

En el procedimiento de elaboración participan todos los ministerios de la Administración General del Estado, el Centro Nacional de Inteligencia y el Departamento de Seguridad Nacional del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, este último como coordinador general del proceso.

Con la publicación del Informe Anual de Seguridad Nacional, el Gobierno mantiene su compromiso, como no podía ser de otra manera, de acometer una política de transparencia y comunicación pública abierta a la sociedad.

Tres aportaciones de la Ley de Seguridad Nacional

El 30 de septiembre de 2015 entra en vigor la Ley 36/2015, de 28 de septiembre, de Seguridad Nacional. Esta Ley es la primera que en el ordenamiento jurídico español aborda la Seguridad Nacional de forma integral implicando a todas las Administraciones Públicas y a la sociedad en general.

Entre sus principales aportaciones, se destacan tres:

Responde a una necesidad, la de dotar a nuestro país de un espacio de actuación pública que aporte soluciones eficaces frente a los desafíos de seguridad propios de un mundo complejo. Y lo hace de la mejor de las formas posibles, situando al Presidente del Gobierno al frente de la dirección de la Política de Seguridad Nacional.

Hace partícipe al Parlamento. La Ley contempla la creación de la Comisión Mixta Congreso-Senado de Seguridad Nacional, foro de referencia para el debate de los asuntos relativos a la Seguridad Nacional, tales como la presentación del Informe Anual, así como cualquier otra iniciativa que pudiera surgir desde el Consejo de Seguridad Nacional.

Introduce las situaciones de interés para la Seguridad Nacional, que son las crisis que sin suponer una anomalía constitucional, como se contempla en los estados de alarma, excepción y sitio, precisan de una cooperación reforzada de todos los instrumentos del Estado, bajo la dirección del Presidente del Gobierno.

En definitiva, gracias al impulso político, al consenso logrado y al trabajo desempeñado en estos 3 años, España se sitúa a la vanguardia de los países más avanzados en materia de Seguridad Nacional, un camino que se empezaba exitosamente con la aprobación, en 2013, de la Estrategia, y que se consolida con la Ley de Seguridad Nacional, y que siempre tiene que ir a más en beneficio de un país y una sociedad como el nuestro.

 
 
Seguridad Nacional un proyecto compartido