Operaciones y Misiones Internacionales por la Paz y la Seguridad en el Sahel Occidental

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13 de julio 2020
Operaciones y Misiones Internacionales por la Paz y la Seguridad en el Sahel Occidental

En 2012, una nueva revuelta tuareg contra el Gobierno de Mali en el norte del país fue el detonante de una enorme crisis de seguridad —marcada por la eclosión y expansión del yihadismo violento y por los enfrentamientos intercomunitarios—, económica y social que se ha extendido por la región del Sahel Occidental, y que ya se proyecta hacia los países del Golfo de Guinea.

Esta convulsa situación tiene claras repercusiones más allá de las fronteras sahelianas, y afecta directamente a Europa. Hoy, en un mundo globalizado e interconectado, la seguridad y el desarrollo de África y Europa son más comunes que en cualquier tiempo pretérito. Como señala la Estrategia de Seguridad Nacional 2017, los conflictos, el crimen organizado y el terrorismo en el continente africano también amenazan a la seguridad de los españoles; sus secuelas incrementan los movimientos migratorios irregulares hacia Europa; y la inestabilidad que provocan incluso puede afectar al suministro energético en España.

Desde el inicio de la crisis en Mali, la comunidad internacional despliega numerosas operaciones y misiones militares y civiles en el Sahel Occidental, que hoy representan el mayor esfuerzo internacional por la paz, la estabilidad y el desarrollo regionales. En la actualidad, Naciones Unidas y la Unión Europea son las principales organizaciones internacionales presentes en la región, junto con las operaciones militares de Francia. En este contexto, la amplia contribución de España —consciente de que la seguridad y el desarrollo son objetivos comunes a ambos lados del Mediterráneo— es la mejor muestra de nuestro compromiso con el continente africano.
 
Misión Multidimensional integrada de Naciones Unidas en Mali (MINUSMA)

Establecida en abril de 2013, MINUSMA tiene el mandato de apoyar la aplicación del Acuerdo de Paz de Argel (2015), proteger a los civiles y apoyar la labor de las autoridades de Mali para estabilizar el país. Con más de 15 610 efectivos civiles y militares (1 español), la MINUSMA es esencial para la presencia internacional en Malí, especialmente en el norte y el centro del país. En diciembre de 2017, Naciones Unidas autorizó la coordinación de esta misión con la Fuerza Conjunta G5 Sahel, ya que la MINUSMA le proporciona apoyo operacional y logístico.
MINUSMA es la única misión de Naciones Unidas que despliega en un escenario donde el terrorismo yihadista es la principal amenaza, y la que ha registrado el mayor número de víctimas mortales (209) en el menor periodo de tiempo.

Misiones Unión Europea

Desde 2013, EUTM Mali asesora y adiestra a las fuerzas armadas de Mali para aumentar su capacidad operativa y que, en un futuro a medio plazo, puedan afrontar los numerosos desafíos —especialmente la amenaza yihadista— que ahogan a su población, además de restablecer la integridad territorial del país y mejorar el control de las fronteras en cooperación con sus socios del G5 en el Sahel. Actualmente, esta misión militar está liderada por Portugal. España despliega 187 militares en la misión, y ha asumido la jefatura de la misión en dos ocasiones (en 2015 y 2018).

Por su parte, EUCAP Sahel Níger y EUCAP Sahel Mali (2015) —que comenzaron su despliegue en 2012 y 2015, respectivamente— son misiones civiles, ambas con contribución de España, que asisten a las fuerzas de seguridad interna de los países a través de la formación, el asesoramiento estratégico y el equipamiento, para implementar la Reforma del Sector de Seguridad liderada por los gobiernos nacionales. Estas dos misiones cooperan con G5 Sahel en el incremento de las capacidades policiales y judiciales de la región.
 
Operaciones de Francia

En 2012, los movimientos terroristas y radicales amenazaron la integridad y la seguridad nacional de Malí y podrían haber asumido el control a largo plazo de franjas de su territorio.

A petición del Gobierno de Mali, Francia lanzó la Operación Serval en enero de 2013 para hacer retroceder a los grupos terroristas del norte, en apoyo a las tropas malienses y otros Estados africanos. A pesar del esfuerzo militar, los grupos terroristas siguen activos en toda la zona. En 2014, la Operación Barkhane (5 100 militares) sucedió a la Operación Serval, con el objetivo ampliado de prestar un apoyo más integral —incrementar la seguridad, extender la administración estatal y asentar las bases para el desarrollo social— a los países que conforman la iniciativa G5 Sahel.

Por otro lado, en el segundo semestre de 2020, las fuerzas especiales francesas comenzarán despliegue en Mali, junto con otras fuerzas de asociados europeos, una unidad conjunta denominada Task Force Takuba, que estará bajo el mando de la Operación Barkhane. Por el momento, Bélgica, Dinamarca, Estonia, Países Bajos y Portugal han confirmado su contribución a esta fuerza conjunta, mientras que Suecia está pendiente de aprobación parlamentaria.

España 

Además de su participación en las misiones de Naciones Unidas y de la Unión Europea, España contribuye con otras misiones a la seguridad y estabilidad del Sahel:

  • En 2106, la Guardia Civil presentó el proyecto europeo GAR-SI Sahel (Grupos de Acción Rápida de Vigilancia e Intervención en el Sahel), que tiene como objetivo crear seis unidades de Acción Rápida en los países que componen el G-5 Sahel y en Senegal completamente formadas equipadas y operativas. Liderado por la Guardia Civil, participan la Gendarmería Francesa, los Carabinieri de Italia y la Guarda Nacional Republicana de Portugal
  • Destacamento Marfil (Senegal) del Ejército del Aire —compuesto por 50 efectivos y 1 avión de transporte— que apoya al contingente español de EUTM Mali, y también a la operación francesa Barkhane.

 

 

 
 
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