23/06/2022
7 min lecturaDesde el golpe de Estado de agosto de 2020, Mali está sumido en un largo periodo de transición política. Desde entonces, dos juntas militares se han sucedido en el poder, mientras que el retorno de un gobierno civil se sigue retrasando. Este proceso nacional está enmarcado en un creciente aislamiento internacional, un progresivo acercamiento a Rusia y, por último, un constante deterioro de la situación de seguridad, provocado tanto por el terrorismo yihadista como por la violencia comunitaria.