ONU celebró declaración conjunta entre Armenia y Azerbaiyán, considerándola un avance en normalización de sus relaciones, y reafirmó su apoyo a esfuerzos por una paz duradera en Cáucaso Sur. Rusia e Irán también valoraron el acuerdo, mediado por EE.UU., aunque alertaron sobre posibles consecuencias de interferencias externas. Rusia defendió que la reconciliación se defina en marco regional, con implicación de países vecinos (Rusia, Irán y Turquía), y advirtió sobre riesgos de ciertas actuaciones occidentales, citando la misión de observación de UE en Armenia. Sobre propuestas estadounidenses para desbloquear comunicaciones y crear un corredor estratégico, recordó siguen vigentes acuerdos trilaterales y que Armenia continúa integrada en espacio aduanero de Unión Económica Euroasiática. Irán mostró su preocupación por una eventual intervención extrarregional en sus zonas fronterizas derivada de iniciativas de EE.UU. y subrayó que estas no deben poner en riesgo la estabilidad. En mayo, UE anunció la intensificación de la cooperación y una mayor conectividad con el Cáucaso Sur y Asia Central para promover la estabilidad y la seguridad. Fuente: ONU; Unión Europea; Gobiernos Rusia e Irán