La situación de seguridad en el sur del país se ha deteriorado de manera significativa, con ataques de grupos armados extranjeros, secuestros y actos vandálicos contra la infraestructura Gran Río Artificial, que suministra agua a las ciudades costeras libias. Este clima de inseguridad limita todavía más la deficiente prestación de servicios a la población que reside en esta zona. La Misión de Apoyo de la ONU en el país ha instado a las autoridades libias a tomar medidas inmediatas para frenar esta situación y ha mostrado su apoyo y disposición a continuar proporcionando asistencia humanitaria. Fuente: Misión de Apoyo de la ONU en Libia